PEQUEÑO SER
Dios debe odiarnos mucho, porque solo hace acto de presencia cuando todo está bien (gracias a Dios tengo trabajo, gracias a Dios tengo salud, todo está bien gracias a Dios, etc.) y cuando más lo necesitamos (guerras, terremotos, dictaduras, ataques terroristas, accidentes de todo tipo, etc.) brilla por su ausencia. Como se ve no es tan grande como se dice o tal vez, se me ocurre, tenga las manos demasiado pequeñas porque los que se salvan siempre son pocos en relación con los que perecen, que siempre son muchísimos más.
Pequeño Ser por Francisco A. Baldarena se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://creativecommons.org/choose/?lang=es#metadata.

Comentarios
Publicar un comentario