EL DIVORCIO
La jueza de paz le preguntó al hombre por cuál motivo quería divorciarse.
Porque no quiero seguir siendo un cero a la izquierda, señora jueza; desde el primer día de casados que me siento así, respondió el hombre, echándole una mirada de reproche a la esposa, sentada junto a él. La jueza dirigiéndose a la mujer le hizo la misma pregunta.
Porque no quiero seguir siendo la única a cargar con los gastos de la casa, señora jueza; desde el primer mes de casados ha sido así, respondió la mujer, devolviéndole a su marido una mirada de desprecio. La jueza consultó el expediente, donde constató que los solicitantes del divorcio llevaban casados exactamente veintisiete años, ocho meses y doce días. Entonces, luego de meditar por un momento,les preguntó:
¿Y me pueden decir por qué carajo esperaron casi diez mil cien días para llegar a la misma conclusión? Y meneando la cabeza contrariada remató: Ni que la vida fuese algo que se encuentra tirado a la vuelta de la esquina.
Fin.
EL DIVORCIO por FRANCISCO A. BALDARENA se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional.Basada en una obra en https://creativecommons.org/choose/?lang=es#metadata.

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