EL NUDO
Menos mal que se me dio por mirar al costado, sino qué papelón; el nudo del otro estaba mejor hecho que el mío. Por suerte el verdugo fue muy comprensivo y atento corrigiendo el nudo de mi soga, que quedó igual al del otro condenado.
Fin.

EL NUDO por FRANCISCO A. BALDARENA se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://creativecommons.org/choose/?lang=es#metadata.
Comentarios
Publicar un comentario